Comienza a salir el sol por todo el país, comienzan los días cálidos y también la necesidad de empezar a destaparnos. Mangas cortas, tirantes, escotes, pantalones y faldas cortas y ya finalmente el bañador.

Si bien es cierto que es bueno proteger la piel de nuestro rostro durante todo el año, cuando aprieta el sol y el calor, debemos empezar a hacer lo mismo con todo el cuerpo.

Hoy os voy a hablar de LA PROTECCIÓN SOLAR

Es cierto que disfrutar del sol en dosis moderadas nos da energía y contribuye a la producción de Vitamina D. A mi por lo menos exponerme al sol durante un ratito, aunque no sea de manera directa, me recarga de energía y hasta me pone de buen humor, será quizás que viviendo como vivo en Ourense, no disfruto todo lo que me gustaría de los días soleados.

Sin embargo , el sol también tiene efectos negativos. La luz del sol contiene rayos UV que incrementan el riesgo de quemaduras y de padecer cáncer de piel. El envejecimiento prematuro de la piel y una pigmentación no deseada son algunos ejemplos de los efectos negativos de la exposición solar excesiva. Para disfrutar del sol de manera segura reaplica tu protector solar frecuentemente.

En primer lugar os voy a explicar que es el SPF:

SPF significa Factor de Protección Solar. Es la forma de conseguir protección frente a los rayos UVB. La diferencia entre los distintos valores de protección SPF , reside en el nivel de protección UVB que ofrecen durante la exposición al sol, es decir, durante cuanto tiempo vamos a estar protegidos del sol. Cuanto más alto es el SPF, más alta es la protección frente a la penetración en la piel de los rayos UVB.

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Representa un factor de tiempo que retrasa la aparición de una quemadura solar en condiciones estandarizadas: para un sol que irradie UVB y UVA y para una cantidad de producto fotoprotector aplicado sobre la piel de 2 mg/cm².

Si se produce una quemadura solar, sin protección, al cabo de 15 minutos de exposición, con un producto fotoprotector de SPF 10 no aparecerá hasta los 10 x 15 minutos, es decir 150 minutos, en las mismas condiciones de exposición y así con todos los tipos de protección.

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Está demostrado además, que llegado cierto nivel de SPF, por más que subamos de número, no vamos a estar mucho más protegidos, por eso se ha estandarizado que el nivel máximo de protección es el de 50. No os creais aquellas marcas que os intentes vender protección total, o protección 90, porque no tienen más efecto que la protección 50. Mirad la curva:

Abajo, en horizontal, tenéis al FPS que hacia la derecha va aumentando y en vertical tenéis el % de reducción UV, es decir, cuanto nos protege del sol. Si os fijáis  con un SPF 10 tendremos un 90 % de protección solar ya, con un SPF 20 un 95%, pero luego ya la curva se estanca y no crece a penas. La protección 50 solo nos va a dar un 98% de protección solar, un 3% más que la protección 20.

Entonces, como elegir el factor de protección adecuado?

Pues vamos a tener en cuenta varias cosas, en primer lugar nuestro tipo de piel o Fototipo:

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Lógicamente las pieles más blancas necesitarán una protección solar más alta y las pieles más oscuras una más baja, pero no quiere decir que no necesiten de protección solar.

También tendremos que tener en cuenta:

  • Momento del día. El sol es más intenso y dañino entre las 11 am – 16 pm. Durante estas horas debe evitarse la exposición al sol o hacerlo con una alta protección.
  • El medio. La nieve, la arena y el agua puede reflejar hasta el 90% de la luz solar. Por tanto hay que tener especial cuidado cuando nos damos un baño, navegamos o estamos esquiando.
  • Condiciones metereológicas. El viento tiene un efecto refrigerante en el cuerpo, pero no reduce la intensidad del sol por otro lado las nubes dejan pasar una gran cantidad de rayos UV por lo que es necesario tener especial cuidado en estas situaciones.

Otro tema super importante que tenemos que tratar es

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Cómo aplicamos nuestra protección solar?

  • Aplicar 20 minutos antes de la exposición al sol.
  • Asegúrate de proteger zonas en ocasiones descuidadas como orejas, cuello, manos y pies así como las zonas que normalmente no están expuestas al sol.
  • Reaplicar al menos cada dos horas o más frecuentemente después del baño o si sudas en exceso.

También es importante que para la zona del rostro utilicemos un producto específico para el mismo pues las crema solares para el rostro están especialmente desarrolladas para cubrir las necesidades de la piel de esta zona por ser más delicada. Además de la protección -UV y los agentes hidratantes, contienen ingredientes que previenen la grasa y los brillos y también ofrecen un mayor cuidado e hidratación y agentes antienvejecimiento proporcionando al rostro de un cuidado especial.

Y bien, una vez que ya tenemos todas estas cosas claras, ya podemos empezar a tomar el sol con seguridad. Oriflame nos ofrece con su nueva línea Sun Zone una completa gama de protectores solares para toda la familia:

Contienen Filtros UV que protegen la piel de los daños de los rayos UVA y UVB y que los reflejan convirtiéndolos en energía. Por su parte la Vitamina E de propiedades antioxidantes ayuda a proteger la piel de los daños de los radicales libres. Además son Resistente al agua y Dermatologicamente testados

Tienen unas Texturas Agradables, de rápida absorción, ligeras e hidratantes y no dejan manchas.

Yo ya tengo los míos preparados para este verano, y tu? Te animo a probar con esta estupenda línea de Protectores Solares Oriflame

Chao!

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